4 jul 2011

El cáncer, una enfermedad poco común en la Era de Trujillo



Hoy día. Según la Dirección de Información y Estadística del Ministerio de Salud, en su informe de 2009, el cáncer ocupa el tercer lugar entre las principales causas de muerte en la población dominicana, siendo el causante de por lo menos el 15% de las defunciones
Escrito por: MERCEDES PÉREZ REYES
En los escritos sobre la Era de Trujillo se habla de las diferentes enfermedades que padecía la población de la época y en ellos no figura el cáncer como una de las más comunes.

Es muy probable que ya se hubiera descubierto su existencia, pero los casos no abundaban.

Enfermedades como uncinaria, conjuntivitis, tosferina, paludismo y sífilis, son mencionadas como comunes en la época por Mario Read Vittini en su libro “Trujillo de cerca”.

“Los niños con mucha frecuencia mostraban su abultado vientre polvoriento, hinchado por la abundancia de parásitos, principalmente “ascaris”, relata Read Vittini .

Durante algún tiempo corrió la información de que Rafael Leónidas Trujillo padeció de cáncer de próstata, a lo que se atribuuyó su alegada disfunción eréctil. El prestigioso doctor Abel González, quien había tratado al dictador, se ocupó de desmentir esa especie

Crónicas posteriores han señalado que el “Benefactor de la Patria” padecía de incontinencia urinaria.

Euclides Gutiérrez Félix, en su obra “Trujillo: Monarca sin corona”, relata que a mediados de 1956 Trujillo hizo que el doctor Antonio Puigvet, uno de los urólogos más eminentes de España, viniera a examinarlo.

Esto pudiera indicar que las especulaciones sobre su salud reproductiva podrían haber sido ser ciertas.

Datos específicos. En 1942 fue fundada la Liga Dominicana Contra el Cáncer, entidad incorporada legalmente cinco años después.

Esto podría indicar que ya habían casos de esta enfermedad en el país y se estaba pensando que pudiera avanzar considerablemente, pues se hacía un llamado de alerta, pero quizás sin saber que este padecimiento se convertiría en el futuro en uno de los principales tormentos de salud.

La misma se creó con el objetivo de prevenir, detectar y tratar el cáncer, función última que ejerce a través del Instituto de Oncología, que tuvo sus orígenes después de la iniciativa de un grupo de profesionales y comerciantes dominicanos que se reunieron con tales fines.

María Martínez, esposa de Trujillo, fue presidenta de honor de la entidad.

Para 1949 se fundó un hospital que fue nombrado “Instituto de Oncología Milagro de la Caridad”, luego de una intensa campaña de recaudación de fondos desplegada por la rama femenina de la institución.

Esta instalación fue objeto de diferentes ampliaciones y dotada de equipos modernos para el tratamiento del cáncer.