29 jun 2011

La palabra diaria: Sin arrepentimiento



Amo la vida que llevo ahora.

Vivir sin arrepentimientos requiere disciplina y compasión. Estoy consciente de mi naturaleza verdadera —soy un ser espiritual, amado y guiado por el Infinito divino. En cualquier momento en que sienta que no he sido lo mejor que puedo, recuerdo que estoy aprendiendo a vivir y a amar al nivel más alto de la sabiduría de mi alma. Pido a Dios que me revele qué cambiar y luego Le pido valor para hacer los cambios.

Al saber que hago lo mejor que puedo, tengo compasión por mí mismo. Al aprender a perdonarme, se me hace más fácil perdonar a los demás. Estoy en paz con el camino que me ha traído a este lugar de comprensión. Sin arrepentimientos amo la vida que llevo ahora.

Porque en otro tiempo erais tinieblas, pero ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz.—Efesios 5:8