AFP / BERTRAND GUAY
El futbolista y la periodista cogieron el pasado lunes un vuelo en Barajas hacia un destino que no transcendió en los medios de comunicación.
Quizá la pareja pensaba que iba a poder descansar durante unos días de las cámaras. Pero sólo han pasado unos días y ya ha sido fotografiada. De tiendas, sentada en un banco y, como no, besándose. Eso si, difícilmente, este beso o cualquier otro eclipsará al que el portero de la selección española dio a su novia después de ganar la final contra Holanda.
Todo esto, mientras suenan campanas de boda ya, que según diversos medios, el guardameta y la periodista podrían casarse en breve en la iglesia de la Asunción de Corral de Almaguer, el pueblo en el que nació hace 25 años la reportera.
